¿Ha tenido usted un
gran amor?, le pregunté, y el otro contempló su plato de ceviche con
intensidad. Sí, confidenció, hace años una mujer me hizo muy feliz y muy
desdichado. Yo empujé con el índice su vaso de cerveza aún con espuma y ataqué:
Pero ya la habrá usted olvidado. El otro mordisqueó una inútil lechuga. Entonces
soltó: Como no, sí hasta el día de hoy la estoy olvidando.
Ilustración:
Lubomir Bukov.